El sector rural, aquel que produce los alimentos para los pueblos, debe ser atendido con prioridad y radicalidad en todos los servicios que el Estado está llamado a proteger, especialmente la SEGURIDAD.

Ya no se está seguro en ninguna parte (hogar, trabajo, paseo etc).
Los delincuentes se dan el lujo de secuestrar familias enteras, incluso se dan tiempo para tomar los alimentos que con tanto sacrificio ha conseguido el jefe de hogar cada semana.
Bajo estas circunstancias se roban ganado, cerdos, gallinas y todo lo que con tanto sacrificio tiene la familia, son tan avezados los delincuentes que se toman fotos con los teléfonos que roban y suben sus fotos en los estados de los perjudicados.

No se conforman con robar sino que humillan a sus víctimas.
Es un clamor entre los campesinos honrados que se les permita defenderse en igualdad de condiciones que los asaltantes. Debe autorizarse portar armas.
Aurelio Chila
Corresponsal en Balzar