Otra vez alboroto en el mismo gallinero
el Correato y su “viejo gallito”,
el Nebosismo y su “gallote” defendiendo su esquina,
el Yacusismo en pacto con la vieja Pachamama,
y el Lassismo queriendo desenredar el lazo
que tanto se ha enredado.
Cada uno con su complejo de poderoso,
dilapidando el tiempo por una vieja costumbre criolla de crear o decir que “hay fraude cuando alguien distinto gana”.
Esto desfasa el poder social del poder político,
y la única forma de constatar ese viejo fenómeno
es “abriendo las urnas”, de lo contrario,
sería difícil saber quién es el verdadero ganador.
Por ello, podemos inferir múltiples causas y análisis
a esto que puede ser un mal entendido
“o un gato encerrado” en las ánforas del CNE.
¡Abran las urnas!
Los ecuatorianos queremos saber la verdad,
¡De verdad!
TIRO: 231
