
La apasionada convicción con la que los Presidenciables nos ofrecen fascinantemente su deber sagrado de servir al país, poco tiene que ver con sus actos falsarios y promiscuos con los que hacen política.
¡Coherencia, Señores Políticos!
Corromper a la Prensa para que ataquen a sus contendientes, y luego pedir el apoyo para salvar a la Patria es un acto de incoherencia burda y cobarde.
¡Coherencia, Señores Políticos!
Por más que sean esplendorosos católicos, y aporten mucho a favor de los pobres, denostar al rival discriminándolo con guerras comunicacionales sucias, no los hace mejores a ninguno de ustedes.
¡Coherencia, Señores Políticos!
Hacer gala de ser ricos en un país saqueado no te hace mejor sino “el mejor acomodado entre los escombros”, mientras comienzan a reinar las aves de rapiña.
¡Coherencia, Señores Políticos!
TIRO: 89