
América Latina se ha empequeñecido dentro de los tiempos históricos.
Si revisamos, descubriremos que no coincide para nada
los tiempos vividos por los latinoamericanos,
con el tiempo actual con el que se construye
la historia de la humanidad evolucionada,
en temas de evolución política, social, biótica y planetaria.
En plena posmodernidad los ciudadanos aún vivimos
sumergidos entre populismos, en una región enferma de esnobismos,
que desprecia lo mejor de sí mismos.
En Latinoamérica existen unos vencedores que justifican sus privilegios
por el derecho que dicen tener ya que ellos son nuestros Salvadores,
por ello, se pasan mintiendo por lo que dicen y por lo que callan.
Este desfile de nuevos héroes revolucionarios
nos desafía con su poderoso enigma Mesiánico,
y así quedamos ciegos, sin posibilidad de aprender a mirar.
Seguimos aquí, entre los vaivenes de los mitos,
y sin que como pueblo encontremos la conexión
de la cabeza con el cuerpo social.
América Latina, sigue aislándose de la sociedad global,
sin que sus dirigentes sean capaces de construir evolución social,
democrática y tecnológica, ya lo dijo Simón Bolívar:
“Los pueblos latinoamericanos no son capaces de imitar
ni siquiera la originalidad”.
Ojalá que encontremos la fuerza necesaria para desembobarnos.
TIRO: 371