
“Donde no hay ley, hay Caciques sin plumas o con plumas, y vivirá siempre un gamonal en ese entorno;
alguien a quien los mortales no lo limitarán”.
Por ello, aún no es tarde
para limitar la tradición tiránica y caciquesca
y comenzar avalar socialmente las necesidades
tan claras del pueblo, de poder estar seguros
que no lo gobernarán los viles
y que la ley no se aplicará
de acuerdo a la voluntad de ningún Cacique.
Aclaremos; la masa seguirá cautiva y prisionera
del furor de los cacicazgos,
que con ira y con celo querrán que en masa
los pueblos se precipiten a adornarlos.
Es evidente que Amérika Latina, ha sido y es el feudo de Caciques como Bolívar,
que le enseño a los bolivarianos administrar a Hispano América
como sus tatara abuelos, el territorio Latinoamericano
como que si fuera una hacienda propia.
TIRO: 239