Cuando la tierra caliente hace miles de millones de años empezó a formar lo que ahora serían los continentes conocidos por el hombre, no se podría imaginar que la majestuosidad de la Naturaleza de nuestro planeta nos regalaría este imponente atractivo que tenemos en la provincia.
Ubicado en la provincia que lleva su nombre, anteriormente provincia de León, en pleno centro del Ecuador se ubica el volcán Cotopaxi.
Si vas por la carretera Panamericana desde Latacunga hasta Quito, que tiene 48,000 km de vías a lo largo de toda América; podemos admirar en un día soleado el imponente coloso de 5.911 metros de altura, siendo así la segunda cima más alta del Ecuador después del volcán Chimborazo, con mas de 6.200 metros desde su base.
La primera persona en escalar al Cotopaxi fue el científico europeo, que formó parte de la misión geodésica Alexander von Humboldt en 1.802, pero sin éxito.

Tuvieron que pasar 70 años para que el explorador y científico alemán Wilhelm Riess y un acompañante el 28 de Noviembre de 1.872 ascendieran hasta su cumbre y tuvieran el privilegio de ser los primeros en observar como se ve la tierra desde el cielo en lo mas alto del Cotopaxi.
Fue declarado Parque Nacional el 11 de agosto de 1975 en la presidencia de Guillermo Rodríguez Lara.
Abarca tres provincias, Cotopaxi; Napo y Pichincha, teniendo una extensión total de 333 kilómetros cuadrados, así es el segundo Parque Nacional de acuerdo a su área después del parque Yasuni.
Tiene una reserva forestal de gran biodiversidad y con un ecosistema que principalmente es el páramo andino; mostrado a lo largo de sus senderos hasta llegar a su cima.
Dentro de la clasificación de los volcanes, el Cotopaxi es un volcán compuesto, que está en el cinturón de fuego del Pacífico, con 452 volcanes activos en su placa que abarca toda la costa Oeste de América y la costa este de Asia.
Es el volcán más activo de todo el país, con impresionantes erupciones registradas desde el siglo XVI hasta la última en 1.877; en la cual quedaron asentados en los registros históricos que sus cenizas, lava y escombros se extendió a lo largo de más de 100 km, desembocando a través de sus ríos hasta el océano Pacífico, alcanzando su ceniza hasta la ciudad de Guayaquil.
En agosto del 2015 causó un gran susto al expulsar ceniza al aire, piedras y escombros a los ríos.
Sus nieves perpetuas llaman desde lejos a los turistas a que se acerquen a él, a que lo recorran a través de los senderos establecidos por las autoridades.
Dependiendo de la condición física del turista, los caminos que guían en sus alrededores, subir al campamento base o hacer cumbre le darán una maravillosa experiencia, paisajes y vistas que no dejará de fotografiar y un momento inolvidable.
Para recorrer y ascender hasta su cima al volcán nevado Cotopaxi siempre se debe estar acompañado de un guía de alta montaña calificado, hacer caso a sus instrucciones y por supuesto estar acondicionado físicamente.
Éstos datos servirán para cuando la pandemia pase y nuevamente se pueda disfrutar del paisaje impresionante que ofrece nuestro Ecuador biodiverso.
RENATO MONCAYO
CORRESPONSAL EN COTOPAXI