
Todos hacen espíritu de cuerpo,
los plutócratas con los tecnócratas,
y burócratas que tienen canonjías y poder
para seguir con sus raterías,
aunque tengan que incendiar la Nación
para no perder el poder ni el billete.
Todas las mafias como los ejércitos
generan espíritus de cuerpo,
y rituales para amalgamar los perversos goces
con lo que amasan fortunas,
y en nombre de la paz, de la Patria o el amor,
vendiendo ilusiones y roban esperanzas
y al erario Nacional.
¡Ay de los “Espíritu de cuerpo”
y de sus engañosas exclamaciones!
Unos gritan: “La Patria ya es de todos”
Otros dicen que “El Gobierno es de todos”
Al final nada de esto ni ha sido ni será de todos,
simplemente vivimos otra vez una catastrófica colusión
entre empresas nacionales y transnacionales corruptas
y “tecnócratas de profesión”,
que intencionalmente intimidan a las masas
para terminar jodiendo a la Nación.
TIRO: 99