
La necesidad de hacer presente el pasado a través de la unión entre la melodía y el ruido es lo que mueve a componer a Giler, quien tambien se encuentra colaborando en distintos proyectos sonoros como TINNITUS o la banda de rock noise guayaquileña A.D.N. En esta ocasión nos comparte sus intereses mientras nos dialoga un poco sobre su nuevo proyecto como solista.
GS: ¿Cómo decidiste involucrarte creativamente en la música?
JG: La música para mí, al igual que otra práctica artística es un medio de comunicación por el cual expresamos y drenamos nuestros intereses y aptitudes. Mi relación con la música se dio desde muy pequeño, me divertía mucho cantar y actuar para mis compañeros en el jardín de infantes, en casa también junto a mi madre nos entreteníamos buscando música por fuera de las convenciones comerciales y la suma de ese gusto con el ejercicio de exploración de algo más allá de lo que ofrecen las emisoras radiales fue lo que me llevo en la adolescencia a interesarme por la investigación de mi propio sonido.
GS: ¿Que has venido haciendo musicalmente?
JG: En el plano solista, trabaje alrededor de dos años para grabar el disco “Suave“, promocionado en el año 2015 por medio de la plataforma Bandcamp y relanzado en el 2019 a través de Spotify y de forma física (con 50 ejemplares). Este disco estuvo inspirado particularmente en mi niñez, su paso a la adolescencia y la fascinación por el arte naif. Mientras que en canciones como Leche chocolate o Chico robot la idea fue recrear melodías que había escrito y cantaba de pequeño, en Manicero y Going back la intención se posaba en la inmediatez de las letras y la música. Crear “Suave” fue una divertida aventura personal que me permitió rememorar aquellos años en los que jugaba a ser músico.
GS: Cuéntanos sobre tu nuevo proyecto ¿Crees posible, diferencias y similitudes técnicas y conceptuales con tus trabajos anteriores?
JG: El álbum que estoy preparando se enfoca en el Ser, desde su complejidad existencial hasta sus cuestionamientos a nivel social, técnicamente indago en la formalidad Lo-fi, (baja calidad) mezclada con el uso de samples (recurso muy utilizado en hip hop). En este álbum a diferencia del anterior (SUAVE) que se realizó con una intención lúdica característica de la niñez, intento introducir un nivel más conceptual a partir de las letras, la música y el diseño de todo el disco que en esta ocasión estará dividido en introspección y extrospeccion, con el fin de proyectar esa experiencia dual que nos conforma.
GS: ¿Cómo vez la escena musical “underground” de la ciudad de Guayaquil?
JG: Creo que Guayaquil es una ciudad que desde lo under lucha por seguir en pie y no perderse en la venta de su propio ser. En cuanto a la difusión radial, a mi parecer continúa siendo complicada la emisión del rock ecuatoriano en la mayoría de emisoras en horarios estelares y creo que el apoyo a esta área permitiría construir una nueva manera de acércanos a la música, parando de una vez por todas la persecución y el cierre de estos espacios y rompiendo estereotipos al tiempo que crea un público nuevo para la producción nacional enfocada en esta rama.
GS: ¿Qué recomendarías a tus pares músicos contemporáneos?
JG: Les recomendaría ser ellxs mismos, aprender a oír y sobre todo no olvidar ser niñxs, ya que ellxs crean todo el tiempo, resuelven los conflictos rápidamente y se maravillan con cada aprendizaje. Es importante desarmarse, ya que solo así llegaran a su verdad.