Los indígenas, los transportistas, y algunos grupos de trabajadores agremiados, nos tienen acostumbrados a escuchar las mismas letanías de siempre.
Un grupo de indígenas y de trabajadores, anunciaron un levantamiento para los próximos días. Estos grupos de ecuatorianos, siempre que llega un nuevo gobierno, quieren aplicar la misma fórmula, sin entender que estas actividades son penadas por la ley.
Las autoridades siempre guardan silencio sobre esta actitud recurrente, y esto ha llevado a estos grupos a tomarlo como costumbre, cuando la costumbre no constituye derecho.
Hoy vemos a un patriarca indígena, que posiblemente con la finalidad de ganar las elecciones de la CONAIE, amenaza públicamente con paralizar los servicios públicos. La Fiscalía, de oficio, debería haber iniciado una investigación por la amenaza realizada.

Las autoridades encargadas de cuidar los intereses de la mayoría de los ecuatorianos, demuestran un letargo en sus actuaciones, y con ello, permiten que se conculquen derechos.
El Presidente Constitucional Guillermo Lasso Mendoza, debería exigir la aplicación de la ley, sin que esto signifique intromisión, pues se hace necesario y urgente poner orden en el país, ya que para eso fue elegido.
Antonio Lima – Corresponsal en Durán.