Falta menos de un mes para las elecciones, y todavía no están cerradas las papeletas para elegir presidente y asambleístas. La presidente del Consejo Nacional Electoral, Diana Atamaint, ha demostrado que no está capacitada para ejercer dicho cargo. Pero además de ineptitud, también hay indicios de falta de independencia en el ejercicio de sus funciones.
El candidato del correísmo fue impugnado porque su inscripción no cumplía con lo establecido en el Código de la Democracia.
Pero a la Ing. Diana Atamaint no le importó el marco legal, ya que fue notorio que debía calificar dicha candidatura, entonces se le ocurrió decir que “participar en las elecciones es un derecho humano de Arauz“, y por lo tanto; dio su voto a favor de la inscripción.
En situación similar fue inscrito el candidato Yaku Pérez.
Sin embargo, el argumento de “que la participación en la contienda electoral es un derecho humano” sin que importe lo determinado por el Código de la Democracia, la mayoría de los consejeros del CNE se niegan a utilizarlo para la candidatura del empresario Álvaro Noboa. Esto es proceder con favoritismo para Pérez y Arauz y con aversión para Noboa.
La democracia en Ecuador todavía está en peligro, el correísmo sigue incrustado en muchas instituciones públicas.
El esfuerzo realizado por el actual Gobierno para volver al Estado de Derecho peligra debido al trabajo “con dedicatoria” de la mayoría de los consejeros del CNE.