
El Socialismo del Siglo XXI no designa ideología científica ni humanística clara alguna, en pocas palabras es incapaz de definir propósito alguno, peor aún sustancializar una obra política democrática. En resumen, frente a los empujes de la posmodernidad solo ha suscitado emociones agresivas y de vendettas frente al viejo orden.
Diríamos que no son capaces de generar un modelo equilibrado que tenga un destino válido para armonizar y sostener a la sociedad, y orientar el empuje de los múltiples factores internos hacia una final clara y objetiva.
Se han pasado tallando supuestamente “ideas de vanguardia” haciendo creer a la masa
que ellos son lo suficientemente ilustrados, científicos y técnicos como para desmontar la vieja historia y crear una nueva nación Latinoamerikana.
Olvidándose que para ello no quieren revoluciones sino una seria deconstrucción social y económica que permita la continua innovación, renovación; cerrando y abriendo etapas de procesos que no nos dejen apegotados a ningún orden Castrista, Mercantil o Totalitario.
TIRO: 222