La frase del epígrafe, es atribuida de manera común al físico Alberto Einstein, aunque no hay evidencia de ello, pero es absolutamente cierta, tanto que cuando la escuchamos damos por sentado que su mensaje es indiscutible.
Lo que el físico alemán sí dijo es “Solo hay dos cosas infinitas: el universo y la estupidez humana. Y no estoy tan seguro de la primera”.
El año 1999 en el Ecuador se desató una de las peores crisis económicas y sociales, los principales causantes fueron:
• El Exbanquero Fernando Aspiazu, el más fuerte del Ecuador en ese entonces.
• Un grupo de diputados que formaron la bancada conocida como la Aplanadora.
• El Expresidente Jamil Mahuad y su equipo económico.
Aspiazu había entregado 3.1 millones de dólares a favor de la campaña de Mauhad, lo que estaba prohibido porque mantenía contratos con el Estado, cuando quebró el Banco del Progreso y fue apresado, recién denunció que su aporte no fue declarado.
La bancada legislativa “La Aplanadora”, creó la ley de la AGD que permitió que la quiebra de los Bancos no la paguen los banqueros sino todo el Pueblo ecuatoriano, incluso muchos banqueros recibieron millonarias liquidaciones por sus servicios en los bancos quebrados, uno de ellos el Banco del Pacífico. Otros banqueros, los más inescrupulosos, aprovecharon la angustia de los Depositantes Perjudicados, debido a que los titulares de la AGD declaraban que la devolución de los ahorros sería en 10 o 30 años, hicieron su agosto comprando estos Títulos Valores (CDR) a mitad de precio y acto seguido negociándolos a su valor nominal en la CFN o en la AGD, y llevando a la quiebra de la Corporación porque la Ley le obligaba a recibir papeles y entregar efectivo.
En el Gobierno de Rafael Correa, el ingenio la Troncal fue comprado por una empresa peruana usando estos títulos valores que pertenecían a la AGD y que fueron creados para que los Banqueros no quiebren y para que ganen fortunas.
Muchos ecuatorianos están convencidos que las personas que causaron la quiebra de millones de familias ecuatorianas en el año 1999, son las mismas que ahora resolverán la actual crisis ecuatoriana, causada por el correismo, pero cuyo origen se remonta al trabajo de la Aplanadora.



¿Será que Einstein estaba en lo cierto?
¿Será que la estupidez ecuatoriana es infinita?
¿Estarán locos un gran porcentaje de ecuatorianos?