¡Cada vez se producen más objetos de plástico!
Sus desperdicios se trasladan por los ríos y océanos, se acumulan en las playas y dañan las hábitats, y son una amenazan para la vida de animales y de las personas.
De toda la basura, los residuos de plástico son los que tienen el mayor potencial nocivo para el medio ambiente, la vida silvestre y los seres humanos. Se encuentran flotando en la superficie, suspendidos en columnas de agua o en el lecho de casi todas las masas de agua.

En los ríos y en los océanos se mueven con las corrientes y son comidos por mamíferos, aves y peces, que concentran sustancias químicas tóxicas en sus tejidos, animales que al ser consumidos, pasan las sustancias tóxicas al organismo de los humanos.
Las especies marinas ingieren estos plásticos porque los confunden con peces pequeños, y al no poder ser digerido produce la sensación de saciedad, y los animales dejan de buscar alimento y mueren por desnutrición, debilidad o porque son presas fáciles de los depredadores.

El plástico se dispersa fácilmente por lo que se lo puede encontrar en todos los rincones del planeta, desde el Ártico hasta la Antártida. Una vez que los objetos de plástico llegan al mar pueden quedarse flotando en la superficie o hundirse y permanecer en el fondo marino, o incluso pueden quedar atrapados en el hielo del Ártico. Ya se han encontrado plásticos hasta en las zonas más profundas, a más de 10.000 metros de profundidad.
Debemos crear conciencia y usar la menor cantidad de objetos plásticos, y cuando los usemos no los debemos desechar al poco tiempo sino usarlos la mayor cantidad de tiempo posible.
Alfredo Rodríguez, corresponsal en Guayaquil.