
Cuando se habla de masajes deportivos, es inevitable dejar de destacarlo como la primera técnica que se aplicó al hombre para ayudar con las dolencias musculares.
En investigaciones médicas y científicas realizadas se ha descubierto que el masaje está contribuyendo a trabajar con nuevos métodos y conocimientos avanzados, llevándolo a lugares privilegiados de la medicina preventiva y de rehabilitación física.
El masaje deportivo difiere del masaje terapéutico, porque es realizado antes, durante y después de una competición deportiva, el objetivo es de preparar al musculo para una práctica deportiva intensa, mejorar el rendimiento muscular, evitando contracturas musculares y lesiones deportivas, relajando los músculos después de los entrenamientos o competencias.
En los Estados Unidos usaron el masaje deportivo como un plan científico de los Juegos Olímpicos de París en 1900, y no fue hasta los Juegos Olímpicos de 1984 cuando el Comité Olímpico estadounidense decidió extender su aplicación a todos los atletas de alto rendimiento y cuando el American Massage Therapy Association comenzó a emitir certificados de especialistas en masajes deportivos sobre el rendimientos muscular en los deportistas.
Para poder llevar a cabo una sesión de masaje deportivo, el deportista debe someterse a varias sesiones que están dadas por etapas de trabajo de la siguiente manera:
- Precompetitivo.- Antes de la competencia se realizara la primera sesión de masaje deportivo, específicamente entre seis y veinticuatro horas antes de la competencia. En este tiempo, el masaje aumentara la circulación sanguínea, subirá la temperatura corporal y ayudara en la elongación muscular.
- Poscompetitivo.- Esta fase del masaje muscular debe de ser aplicado entre sesenta minutos después del finalizar la actividad deportiva a cinco horas como máximo. Con este masaje facilita a que las contracturas musculares desaparezcan y ayudara a eliminar toxinas causadas por el entrenamiento o competencia.
- Mantenimiento.- EL masaje deportivo de mantenimiento, debe aplicarse con el objetivo de diagnosticar posibles contracturas y disminuir la fatiga muscular que provoquen a largo tiempo lesiones irreparables. Es aplicado a los deportistas una vez a la semana.
Alfredo Rodríguez – Corresponsal en Guayaquil, parroquia Ximena.