
Las circunstancias tan tragicómicas que vive el Ecuador nos obliga con objeto de sobrevivir pensar en forma idealista, que lo más importante y beneficioso es imaginar la verdad que creer en ella.
El cromosoma de la corrupción intelectual, económica y social se ha instalado en dos vertientes graves los que se llevan el dinero del Erario Nacional y los que intelectualmente sin tocar dinero alguno, se vuelven cómplices por conveniencias electorales o para no saber del reparto del Poder.
Imposible tensión de esta circunstancia muy pocos quedan liberados, la oposición se alineó silenciosa para darle gobernabilidad al país, y muchos gobernados sin agenda ninguna para darle fuelle de largo plazo al Ecuador.
En fin, no discutamos el cromosoma de la corrupción está en la sangre social del Latinoamérika.
¡Cuidado nos consolamos estúpidamente!
TIRO: 94