Un espíritu de ambiciones globalizadas
va desolando a todos los pueblos terráqueos.
La visión tanto de la Derecha o de la Izquierda,
al final siempre humilla, ya que siguen buscando la victoria
a través de la enajenación del prójimo.
Para cambiar este paradigma hay que sincronizar
la inteligencia con el corazón, si no los milenios humanos
estarán constituidos por sonsas aspiraciones,
con rápido término de expiración.
“Que despierte cada alma en el globo,
para no dejar que la farsa política se siga globalizando”.
TIRO: 438