Nuestro Sistema Educativo solo está fabricando ciudadanos masivamente “primitivizados”; en términos generales, la sociedad ecuatoriana es una máquina de producción de miseria e informalidad, pero ¿qué reina en nuestro país?
“El ego-conformismo de un sistema educativo bastante mediocre”.
Los ciudadanos solo tendremos espacio en la historia si logramos forjar inteligencia contemporánea, dejando de consumir tanta basura política, que nos hace pensar que alguien va a multiplicar el pan. La mediocridad de nuestras Universidades ha fabricado este retardo social, pero digamos lo que digamos, este diagnóstico patrio parece que no importa, porque con subsidios y promesas trágicamente todo ha sido dopado, en tanto nos siguen enredando con viejos dogmas reencauchados para que vivamos inocentes el presente y el futuro potencial.
Los políticos saben de política, pero lo ignoran todo en materia de soluciones, tienen fuerza verbal, pero carecen de paciencia para el trabajo y reconocimiento. Es increíble cuan poco hemos aprendido del sufrimiento y del fracaso como le corresponde a un pueblo inteligente hacer, por ello, así vamos, distanciando la democracia hacia un vacío político que nos está dejando desolados.
El pueblo sigue siendo una masa que intenta decir y no puede, y seguimos sometidos a esta inutilidad social, donde a los ciudadanos no se les forma su voluntad para que logren forjar inteligencia evolutiva y voluntaria.