Visto está que los actos del Presidente Lasso no han sido aceptados
como él ansiaba, y que traicionó su sacramental proyecto
que en 100 minutos la Patria liberalmente cambiaría.
Entre la clase media y Lasso
hay una nupcia que rápidamente se está disolviendo,
y va quedando claro que el centro estatismo plutocrático
lo volvió al altivo Guillermo; sumiso al totalitarismo centro estatista,
ya que ellos saben cómo lambonear la sacra majestad presidencial.
Por ello, ha quedado demostrado
que entre cultos adefesiosos y sin mayor demora
el adalid del liberalismo “vargasllocistas”
dejó de saber por culpa del centro estatismo
cómo hacer que el árbol patrio se vuelva lozano y fresco.