
Cuando la política está enganchada a la mentira
un país no prospera;
más allá del debate entre Lasso y Arauz
y de las frases con las que ellos se autocondenaron,
me gustaría señalar entre ambos candidatos
la calidad y experiencia de sus visiones administrativas.
Es evidente que el Correato destruyó
Empresas Estatales como los correos,
los ferrocarriles, la Aerolínea Tame,
Enfarma, Empresa Estatal que nunca arrancó;
entre otras empresas del Estado,
donde se perdió fácilmente, varias veces
el Patrimonio de cualquier hombre archimillonario
en el Ecuador.
De igual modo, el Correato,
auspiciante del candidato Arauz,
no solo destruyo empresas estatales,
sino cerca de dos mil millones de dólares
en activos que les fueron incautados a los Isaías,
y a Álvaro Noboa, disque para terminar con la impunidad
de los ricos en el Ecuador.
En tanto, “el tan satanizado banquero”
multiplicó el patrimonio de su Banco,
tributando, repartiendo utilidades a empleados y accionistas,
y asesorando financieramente a muchísimas empresas del país,
que también se rentabilizaron en forma eficiente y prudente.
Juzgue Usted amable lector:
¿A quién le entregaría la administración de su futuro socioeconómico?
¿Al equipo de ‘Andrés, no mientas otra vez’ o al de Lasso “el salado”?
TIRO: 269