A los asnos se les pone una zanahoria adelante para que se proyecten hacia adelante. De igual modo; el hombre que es un animal que reconoció la sincronía del tiempo (pasado – presente – futuro), en su sentido constructivista desarrolló la visión de futuro como la zanahoria que lo conduce a aquella fenomenología de la trascendencia. Podríamos señalar, que el futuro empodera al hombre de apostar por ilusiones que lo hacen caminar por desiertos terrestres y siderales, y hace que desde lo cotidiano vaya construyendo el camino hacia su idealización.
Por ende, the future is power: “El futuro es poder”. ¡Adelante!